A las 21:00h salimos dirección el camino del Saytón para enlazar con la subida del Altico los Carros, que por cierto se subió con cierto nerviosismo. Después por la vereda a ritmo de salsa hasta llegar al entrador que nos bajó hasta la Caná del Flaco. Allí estaba Cristina que había preparado toda la mesa y estaba terminando de hacer la cena, que maravilla ya que llegábamos con ganas de llenar el buche. Todo preparado empezó la cena, donde con un ambiente distendido y divertido fuimos comiendo la fantástica torrá que nos habían preparado amenizado con un fantástico gazpacho andaluz a medida que una tormenta empezaba a descargar sus gotas. Tras el postre y el pastel de café con leche merengada (buenísimo también) y los chupitos y/o lingotazos de whisky dimos por concluida la cena.
Además también había parado de llover y el cielo se había despejado por completo llegando a ver la luna brillando junto a las estrellas en una noche fresquita para las alturas de verano en la que nos encontramos.
La bajada tranquila dirección el Saytón, donde despedimos a la gente de Anna y el resto nos dirigimos al Garden a tomarnos el refrigerio habitual antes de ir a casa.
En fín, que de nuevo no nos cansaremos de repetir la buena gente que son Gabi y Cristina y darles las gracias por su amabilidad y hospitalidad. Esperamos que podamos volverla a repetir al año que viene.
También me gustaría comentar el fantástico trabajo que han hecho tanto Gabi, Cristina como su hermano Manolo y su mujer en reformar la Caná y transformarla en un albergue rural respetando al máximo su antiguo espíritu, para todo aquel que quiera disfrutar de un ambiente rural dentro del corazón del Macizo del Caroig. Aquí os dejo en enlace de su dirección web: http://lacanyadadelflaco.blogspot.com.
Fotos desde aquí.
Además también había parado de llover y el cielo se había despejado por completo llegando a ver la luna brillando junto a las estrellas en una noche fresquita para las alturas de verano en la que nos encontramos.
La bajada tranquila dirección el Saytón, donde despedimos a la gente de Anna y el resto nos dirigimos al Garden a tomarnos el refrigerio habitual antes de ir a casa.
En fín, que de nuevo no nos cansaremos de repetir la buena gente que son Gabi y Cristina y darles las gracias por su amabilidad y hospitalidad. Esperamos que podamos volverla a repetir al año que viene.
También me gustaría comentar el fantástico trabajo que han hecho tanto Gabi, Cristina como su hermano Manolo y su mujer en reformar la Caná y transformarla en un albergue rural respetando al máximo su antiguo espíritu, para todo aquel que quiera disfrutar de un ambiente rural dentro del corazón del Macizo del Caroig. Aquí os dejo en enlace de su dirección web: http://lacanyadadelflaco.blogspot.com.
Fotos desde aquí.